miércoles, 29 de diciembre de 2010

¿Quién tiene miedo de Drácula?

Está claro que sentimos emociones ante los personajes y sucesos de ficción. Podemos decir que las emociones van acompañadas por ciertos sentimientos con una actitud positiva o negativa. Digamos que para explicar esta paradoja surgieron tres teorías:
1.      Somos irracionales.
2.      No tengo emociones reales, sino algo parecido, cuasi-emociones.
3.      Soy racional y siento emociones reales.
Pero yo creo que las teorías más adecuadas son la 2 y la 3.
En la teoría 2, de Walton, se dice que imaginamos, no creemos. Imaginamos que estamos en peligro pero no sentimos miedo real, sino cuasi-miedo, porque si sintiéramos miedo real saldríamos corriendo alejándonos del peligro.
En la teoría 3, de Carrol,  se dice que no hace falta que creamos en Drácula para que el miedo sea racional. A veces sentimos emociones con cosas que solamente pensamos.
Estas dos teorías son las que yo apoyo. Podemos sentir emociones reales sin que haya un comportamiento asociado. Nuestros pensamientos e imaginaciones son suficientes para causar esa sensación de miedo.


Epicuro Samos

(Samos, 341 a. C. - Atenas, 270 a. C.) Fue un filósofo griego,. Los aspectos más destacados de su doctrina son el hedonismo y el atomismo. Defendió que el sabio debía mantenerse al margen de la vida política.
La ética, como ya se ha dicho, es la culminación del sistema filosófico de Epicuro: la filosofía tiene como objetivo llevar a quien la estudia y practica a la felicidad, basada en la autonomía y la tranquilidad del ánimo. Puesto que la felicidad es el objetivo de todo ser humano, la filosofía interesa cualquier persona, independientemente de sus características (edad, condición social, etc.).
La ética de Epicuro se basa en dos polos opuestos: el miedo, que debe ser evitado, y el placer, que se persigue por considerarse bueno y valioso.